No le prestes mucha atención al color. No es el mejor indicador de madurez.
Aprieta el fruto ligeramente. Un mango maduro se sentirá ligeramente blando al tacto.
Un mango más firme sería una buena selección si no piensas comerlo en varios días.
Usa tu experiencia con frutas como los aguacates, que también se sienten blandos al tacto cuando están maduros.
Los mangos maduros tendrán muchas veces un aroma afrutado en el extremo de sus tallos.
Maduración y Almacenamiento
Mantén los mangos que aún no están maduros a temperatura ambiente. Nunca lo refrigeres antes de que esté maduro.
Los mangos continuarán madurando a temperatura ambiente, volviéndose más dulces y blandos a medida que pasen los días.
Para acelerar la maduración, colócalos en una bolsa de papel a temperatura ambiente.
Una vez que estén maduros, deberán colocarse en el frigorífico, donde se desacelerará su proceso de maduración. Los mangos enteros maduros pueden guardarse hasta cinco días en el frigorífico.
Para consumirlos puedes pelarlos, cortarlos en dados y colocarlos en recipientes herméticos en el frigorífico por varios días o en el congelador hasta por seis meses.
Manejo y Corte
Usa siempre un cuchillo limpio y una tabla de picar para cortar un mango.
Si has manipulado o cortado cualquier tipo de carne o marisco, SIEMPRE deberás lavarte las manos, el área de trabajo, los utensilios de cocina y la tabla de picar antes de manejar o cortar los mangos.
Consumo
El mango se puede consumir de multitud de formas distintas. Puede ser un componente de una ensalada, acompañar pescados o carnes, en forma de batido o helado; aunque la mejor forma de disfrutar un mango es comiéndolo al natural.